lunes, 29 de septiembre de 2008

CERDANYA 2

La segunda etapa empieza levantándonos pronto para desayunar sin colas. Son las 5 de la mañana y me encuentro sin dolores importantes. También aprovecho para comprobar la rueda y calentar durante un rato.


Así que a la hora de la salida todo es mas tranquilo que el día anterior. La primera parte del recorrido no tiene apenas desnivel, así que no me cuesta mucho seguir la luz de Miquel.



Voy leyendo sin problemas el roadbook e inicio una de las subidas criminales del día. A media ladera me giro para ver la pendiente y veo una imagen curiosa del sendero oscuro perfilado por una procesión de pequeños puntos de luz de los frontales de ciclistas que van subiendo en fila. Es totalmente como la Santa Compaña Gallega. Si la ves la seguirás toda la eternidad... En este punto pasamos a Barbara que va empujando penosamente la bici a pie. Ya no la veremos hasta dentro de 8 horas.

Como hemos salido antes que los primeros clasificados de la etapa anterior, vamos viendo pasar muchas caras, o mas bien culos, de conocidos de los blogsciclistas. Son los que están luchando por la general. Algunos deben haberse perdido porque han tardado mucho en pillarnos.



Llegamos a la parte del sendero peligroso de 5.5 km y realmente es espectacular. Efectivamente hay algunos tramos peligrosos, incluso hay un momento que he de estirar la pierna para mantener la bici quieta en equilibrio y contrarrestar una caída de muchos metros. Como no hay mas remedio, se forma una larga hilera de ciclistas en fila de a uno. De vez encuando dejamos pasar a los mas nerviosos, no sea que nos atropellen.


Esta primera parte la estamos llevando muy bien. Miquel está motivado por los factores de fresquito y rampas de porcentaje no extremo, así que marca un ritmo que me cuesta de seguir pero que no pierdo. Me recuerda la subida al Triador. Llevamos la misma distancia pero ni el afloja ni yo acelero. Vamos como si estuviéramos enfadados. Las bajadas las hacemos muy rápidas pero con control.

En este punto adelantamos a la cabra Noe, que baja muy lenta pero segura. La habíamos visto subir bien pero en la bajada pierde fuelle. Es la sensación que tenía yo en la Gossol-Berga 07 que hice sin suspensión. Todos los que había adelantado en la subida me pasaban burlonamente como cohetes por los dos lados.

Llegamos por fin al tramo de orientación y esta vez le toca a Miquel guiar al Carajillo Team mediante su Garmin. Vemos claro el camino a seguir pero da bastante vuelta. Como no hay otra opción, lo seguimos. El perfil refleja que es un tramo de bajada y en cambio estamos subiendo progresivamente. El suelo esta lleno de rodadas, por tanto si no es la ruta correcta, habrán muchos que también se han equivocado.


Vamos pasando grupos de participantes que están parados delante de diferentes cruces de pistas, intentando averiguar hacia donde ir. De unos de estos grupos se nos une Pedro Vernis, el ganador de la 1ª Titan Desert, que piensa que nosotros vamos en la buena dirección.



Por fin, después de 16 km, vemos el pueblo de Junyent en el fondo de un valle. Seguimos la pista correcta y llegamos al control final de la orientación.



Allí nos cuentan que hemos cogido el camino mas largo. Otros han cogido el bueno, corto y en bajada directa al pueblo. Yo pensaba que habíamos hecho un hachazo a la general y resulta que hemos hecho el primo. Viendo la clasificación de este tramo, los primeros lo han completado en uno 25 minutos, los del medio (nosotros) una hora y los ultimos hev isto hasta de cuatro horas. En fin, al menos hemos conocido a un gran tipo. Igual le dejamos entrar en el Team. Aunque antes tendrá que pasar la prueba de ingreso: meterse dos carajillos de ron en mitad de una etapa de la Pedals de Foc.


Empezamos a subir el último puerto del día y a Miquel le da por mirar la parte final del roadbook. Ya estamos. Michel para que miras lo que queda!!!
Inmediatamente a continuación, se va la nube que tapaba el sol y un calor espatarrante hace acto de presencia. Los árboles desaparecen. El viento se para, las chicharas empiezan a sonar... A lo lejos se ve la pista larga ya scendente que hemos de seguir. Miquel se va fundiendo poco a poco. Hoy en vez de esperarlo y animarlo, que ayer no me funcionó, voy a provar de marcar ritmo a ver si se pica. Psicologia inversa. Nada. Lo voy perdiendo en el horizonte hasta que despues de bastante rato veo un refugio donde espero a que llegue.

Al momento aterriza una cosa requemada por el sol que va soltando improperios. Tal como deja la bici se dirige cansinamente al abrevadero y parece que recupera la forma original de Miquel.




Ya solo quedan unos kilómetros de subida para finalizar el puerto e iniciar una bajada hasta la meta. Ya solo tengo ganas de llegar al último control.

El de la organización que esta aburrido me pide la cámara para hacerme fotos. Como tengo tiempo se la dejo. El resultado es este.



Un cuarto de hora bajando y al fin llegamos a la meta. No se ve mucha gente así que nos vamos corriendo a la ducha para tener agua caliente. Miquel se quiere duchar primero para que no le pase como ayer. Y le pasa como ayer. Agua fría. Cuando me toca a mi, por arte de magia el agua sale caliente. Creo que no es el fin de semana de la mitad del equipo.

Comemos en el césped una ensalada con butifarra frente a la meta viendo los corredores que llegan, algunos muy emocionados y satisfechos. Al rato llega Bárbara. Han tenido problemas mecanicos con la cadena.


Nos despedimos del refugio, cargamos maletas y para casa.


Al final hemos hecho unos 180 km y un desnivel de mas de 5.000 mtrs positivos. Hemos quedado el 36 de mas de 100 equipos, pero lo importante ha sido termina, además de recuperar la confianza que perdí en el Gran Raid.

Ya cuando nos vamos, aparece uno de los amigos de Barbara completamente desencajado, culotte caido (com diu la Barbara, ensenyant la guardiola), arrastrando los pies. Se ha perdido junto a un grupo en el tramo de orientación y le ha salido una etapa de 110 km con dos puertos extras, cuando nosotros hemos acabado con 80 km.
Es la dureza de esta prueba.

miércoles, 24 de septiembre de 2008

VOLTA A LA CERDANYA DEL CARAJILLO TEAM (1)



¿Cómo resumir 180 km de btt en un fin de semana? Imposible. Solo decir lo de siempre: paisajes impresionantes, pueblos aislados como el de TOR (foto), subidas matadoras, bajadas rapidísimas. Un poco como una diferente versión de la Pedals de Foc.


La parte geográfica imagino que Miquel la detallará perfectamente como de costumbre en su Blog, así que yo me centraré en otras cosas.

Llegamos el viernes a Sant Joan de l’Erm y enseguida comenzamos a ver caras conocidas, tanto de la Titan Desert como de los blogs de btt.


Parece que la flor y nata se ha dado cita para esta cursa, y el carajillo team no podía faltar.



Después de la cena la organización nos detalla la jornada del sábado, de unos 100 km y 3000 m acumulados, destacando la parte de orientación donde tendremos que enlazar dos puntos del recorrido distanciados unos 30 km, con un control obligatorio intermedio, sin ningún tipo de indicación en el roadbook.

Solo nos dan una pista: desde el control al último punto solo sabremos que vamos bien si tenemos las piernas arañadas y con sangre. Toma ya. Junto a otra indicación de advertencia de peligro de muerte en el paso de unas rocas que resbalan, nos vamos a dormir. O al menos lo intentaremos.


La noche no ha sido buena. Los ruidos, la emoción y los nervios no me dejan dormir. La cama de Miquel, justo encima, tiene los travesaños a punto de romperse y alguno me cae de vez en cuando, así que en cualquier momento Miquel me aplastará... fatal.

Y así hasta que a las cinco suena el despertador. Las parejas salen cada 20 segundos por orden de sorteo desde las 6.30 h. Cuando quedan unos cinco minutos para salir cogemos las bicis para acercarnos al arco de salida y... mi rueda esta desinflada. PERO SI LA INFLÉ AYER POR LA NOCHE!!!!
Desesperado corro hacia los mecánicos de la organización. Si no estamos a la hora en la salida, saldremos los últimos, y eso si tengo rueda. Quedan dos minutos y empiezo a inflar. 2,2 kg. Cierra válvula. Miquel ya esté en la linea. 4, 3, 2, 1 fuera!!! Aún me estoy poniendo el guante pero he podido salir. Ufff ¿Aguantará la rueda?

Es de noche, no llevo frontal así que he de seguir a Miquel como una papallona. Todo es subida y ya me falta el aire nada mas empezar. La sombra de la patética salida del Grand Raid se desvanece al poco cuando ya cojo ritmo. Nos hemos juntado un montón de corredores haciendo una fila por sendero. Entonces en cuando Miquel se cae. Solo oigo un pequeño OH, del tipo casi me caigo, así que le espero al final del sedero en un prado, sin pensar que le pudiera haber pasado nada. Esta saliendo el sol y es precioso. Aprovecho para hacer fotos a todos los que vienen detrás.

Al rato llega y me cuenta su caída. No hay problema de huesos así que podemos seguir. Pero el golpe y otros factores tendrán sus consecuencias para el resto del día. Miquel se desmotiva y no tiene fuerzas. Intento animarlo pero nada. No le hacen gracia mis chistes malos pero seguimos en carrera, siempre hacia arriba.


Llegamos a la cima de la montaña boscosa y nadie sabe hacia donde tirar. Hay un prado que parece una rotonda, con todos los corredores dando vueltas en circulo. Tengo la imagen de una viñeta del roadbook con una cancela de ganado. Voy en diagonal ascendente hacia un claro donde veo la cancela al fondo del valle. Grito a Miquel que me siga y de repente me encuentro a la cabeza de un grupo de unas 20 personas que me siguen prado abajo hasta pillar una pista rodada. Impresionante.


Mas subida, esta vez hasta una estación de sky. Las cuestas se hacen eternas.


En el control antes de la orientación, cojo el GPS e intuyo el camino para llegar al punto intermedio. Llegamos a él con facilidad en constante subida, pero a partir de aquí, en el GPS no aparece ningún camino, así que seguimos las huellas de las bicicletas montaña abajo hasta que desaparecen. Y aquí es donde viene la parte de arrastrar la bici entre arbustos lacerantes, árboles bajos, etc... Ya sangrando, encontramos al fondo un pequeñísimo sendero que seguimos en la dirección del siguiente control.

Mas adelante vemos participantes en los alto de unas rocas completamente perdidos y otros que viene desde otro sendero paralelo, así que formamos una nueva grupeta hasta el punto de control final donde descansamos. Han sido 2 h y 5 mts. Posición en el tramo 33 de 100.


Destacar el paso de las rocas con peligro de muerte, otro de los factores que desmotivó al Carajilo Team. A lo mejor deberíamos llevar algún termo con esta suculenta bebida para estos momentos. Se trata de bordear una gorga con salto de agua subiendo por un camino de cabras por el lateral, mas empinado que el Pas de Lona, o casi, y pasar con las calas por unas rocas lisas muy resbaladizas. Después de algunos equilibrios pasamos el tramo, pero el ritmo se ha roto.



Mas subidas con calor hacen el resto hasta el ultimo puerto, donde descansamos un rato, pues el último tramo hasta la meta es una subida tipo pestosilla de 6 km que no se acaba nunca.


Sprint final de un medio recuperado Miquel Pies Blancos y al final llegamos medio muertos al refugi. Barbara ni habla, directamente se cae de culo.


Después de una buena ducha para mi y fria para Miquel, pues se le acabó el agua caliente, nos vamos a comer y Miquel dice que mañana no sale, así que he de traerle una tercera cerveza para quitárselo de la cabeza.

Cena, brefeeng para el día siguiente y nuevas advertencias.


Pasaremos por un sendero estrecho que han estado dudando mucho de ponerlo en el recorrido. Es de los mejores que se pueden hacer en el Pirineo pero tiene varios acantilados de nada. Es imposible adelantar durante los dos o tres km que dura, así que se pide que no se presione al corredor que tengamos delante.
Por último advierten que las subidas de mañana tienen rampas mas duras que las de hoy, además de ser “feixugas.





miércoles, 17 de septiembre de 2008

LE GRAND PRIX (2)

Hay un momento clave que es dificil de explicar y que seguramente es el que me permite llegar a meta. Al inicio de la segunda subida, y aseguro que en Suiza las subidas son acordes a sus montañas, sigo sin estar a gusto en la bici. Voy forzado, como si no me gustara lo que estoy haciendo. No me está saliendo una carrera como yo esperaba. Mientras voy cabilando (la imagen en un comic sería mi cabeza tapada con un nubarrón negro) empiezo a oir, que no escuchar con atención, una música especial que no he oido nunca pero que se mete en la cabeza. Llego a un pequeño pueblo donde los pocos espectadores te gritan Courage Yoan Sebástia que han leido en el dorsal, y encima de ellos un músico tocando una impresionante cuerna de los alpes. La música sencillamente me da a entender que estoy en un sitio especial haciendo algo asombroso, así que de golpe, es como si volvieran las fuerzas. Una vez asumida la realidad, sigo por caminos y pistas de paisajes increibles, a tren, a ritmo. Ni flojo ni fuerte, paso a corredores y me pasan.

Y así llego hasta Evolene donde esta toda la familia. Ya solo quedan unos 40 km, que son los mas duros.


Durante la subida interminable no tengo mas remedio que parar. Todas las montañas que he escalado han tenido tarde o temprano su rellanito para recuperarte y seguir. Otras veces he podido dejar de pedalear por algún motivo: llegas al final de una cuesta, hay un fuente, alguien necesita ayuda, ves un sitio para una foto... pero hoy llevo mas de una hora a ritmo y no llega el motivo, ni rellanito alguno para descansar, así que de golpe he de decir basta y quedarme parado en medio de la carretera, estirandome sobre la bici. Espero no tener nunca mas esta sensación.
Y así llego al ultimo control.

Se ve que he llegado diez minutos antes de que cerraran y yo sin enterarme. Como algo mientras veo llegar muy apurados al grupo de catalanes que he visto desde la salida en Verbier.

La chica, Nuria, está bastante tocada. Su pareja la intenta reanimar pero está muy mareada. Es una lastima que despues de pasar todos los controles no pueda acabar, así que intento ayudar llevado su bici y la mia, pero a los pocos metros ya veo que es imposible: al girar la curva veo la madre de todas las rampas y una procesion de ciclistas subiendo a pie por ella. Es el inicio del Pas de Lona, muy parecido a la parte final de la ascensión al Puigmal.


Abandono a los de LLeida y empiezo a subir lentamente. A mitad de camino veo que una moto de la organización hace abandonar a la noia. Dos pasos, para y respirar, tres pasos y lo mismo. Al final opto por ponerme la bici a cuestas. Parece que va mejor.No se porque, pero el maillot de Catalunya me hace barriga... ¿o serán todas las fondues que llevo esta semana?

Por fin llego a la cima, me tomo dos calditos y le pido a mi fotografo particular, un aleman que no me entiende, que me tire mas fotos. Es curioso. Recuerdo del año pasado que Miquel contaba que al llegar al Pas de Lona hacia frio y se tomó un caldo buenisimo. Yo entonces pense que tomarse un caldo debe ser asqueroso en medio de una carrera. Y ahora soy yo el que se toma un caldo en la cima del Pas de Lona, y aunque no me gusta la sopa, la encuentro genial.


Bueno ya solo queda bajar, que gustazo.... he, que es eso... bajar, no era bajar? que hace esa subida aqui!!!! Cabrones!!!!! La realidad es muy dura. Una cuesta enorme se me presenta delante los morros ya sin ninguna fuerza. Veo corredores a lo largo de la cuesta y por tanto la visualizo. El poder de la mente vuelve a demostrar que el ciclismo es un 50 % de la cabeza, y del cabreo que pillo subo la rampa volando.

Ahora si, ya veo la presa famosa y la bajada interminable hasta Grimetz.



La bajada muy peligrosa, pero mentalmente siempre me pasa igual, cuando veo que esta cerca el final aprieto los dientes y voy al limite. Paso varias pistas rotas, pedruscos, riachuelos, me da igual, como si me ponen alambradas de pinchos, nadie me para hasta la meta.


Por fin, llego.
Que emoción. La meta es una rampa que te deja en un escenario donde un speaker dice tu nombre y el club. La gente aplaude mientras unas azafatas te traen agua. Yo les pido una cerveza pero no pillan la broma.

Y el premio es que me está esperando esta belleza.
Miquel tambien acaba de llegar como quien dice. El carajillo team se reencuentra despues de no verse en todo el dia, así que nos explicamos rapidamente las mejores jugadas.


Una ducha cuartelaria, mas o menos fria, y nos vamos a cenar con la familia. El carajillo team esta bajo minimos, y la prueba es que nuestras manos se enrampan y cojen formas raras. Y así acaba la aventura suiza. La frase que dije al acabar, "nunca mas" no fué por el sufrimiento, sino porque esta carrera merece una dedicación que yo no quiero darle el año que viene. A suiza se viene a disfrutar todos los dias, subiendo montañas, bajando senderos, descubriendo pueblos... y eso cansa.

L'année suivante, la curse nous attend.

martes, 16 de septiembre de 2008

LE GRAND RAID 2008 (1)

Después de tantos meses visualizando la carrera, por fin llegó el momento de la verdad. Unos días antes ya se disfruta del ambiente al realizar las verificaciones técnicas de la bici y la entrega del dorsal. He quedado con Miquel para presentarnos en Sion, que no es el paraiso de Matrix, y pasar el día entre stants de bicis y productos complementarios. Yo he aprovechado para adquirir un montón de gels energéticos: con proteinas, con cafeína, con carnitina y con todo lo que acaba en ina que me ayude a terminar los 125 km. También he pillado un paravientos en oferta.


Dando el paseito nos hemos quedado alelados por unos segundos al ver a Barbara. !Esta se ha apuntado a última hora! pero al acercarnos vemos que es una doble suiza de la famosa corredora tarragonina.

Después de unas raclettes y, como no, cervezas que acompañen, nos despedimos hasta el inicio de carrera.

DIA D

Siguiendo el horario suizo, me he dormido a las 22 h sin problemas hasta las 5 h. Como siempre, no calculo bien el tiempo y he de correr un poco estresado para llegar a Verbier, donde recibo el mensaje de que Michel ya ha llegado. Hace un frio soportable, así que no cojo mas abrigo que perneras, manguitos y super paraviento nuevo. En la salida veo a mi lado un chaval clavadito a Dani Pedrosa. Luego me explicaron que era él.

Pum. salida. Poco a poco que no he calentado. Miquel, ve mas despacio. Y a vosotros que os pasa, que aún quedan 125 km! Pero donde vais tan deprisa? Miqueeeell. Y ¿esto empieza ya con esta subida? pues no se acaba nunca.. Miqueeeeeellllllllllll!!!!!!!!
Nada, no puedo seguir el ritmo de nadie. Pulsaciones a 180, me ahogo, no tiro. Esto no puede ser. Voy ha hacer un esfuerzo y pillar al Catalanosuizo este.
-Hombre, ya estas aquí?
-Arf, arfff, ufs, Arfsss, Si. Arfs, arss.
El sprint para enlazar con Michel lo único que ha hecho ha sido asustar a unos cuantos globeros que he adelantado pero que ahora ya vuelven a pasarme tranquilamente. Esta claro que no tengo fuerzas. Tanta caminata diaria pasa factura.

No me queda mas remedio. Tendré que parar y bajar pulsaciones. Así que táctica penosa: descansar con la excusa de que no puedo evitar tener que hacer una foto de este paisaje tan bonito. Esta es la instantánea.

Bueno. Decididamente me he quedado solo, pero al menos voy cogiendo ritmo. Patético pero al menos es un ritmo, que antes era un sufrimiento. Aquí viene la parte mental. No he de forzar y he de controlar. Me da igual que me pasen y quedar el último, solo me importa llegar. Y Michel, pues ya lo pillaré, porque seguro que mas adelante le da una pájara. jeje.

Asumida mi soledad, empiezo a relajarme y disfrutar del momento. Me fijo en los otros corredores, en el paisaje, en mi ritmo. Y así voy comiendo los primeros km hasta la bajada desde Croix de Coeur, que realmente no encontré tan fría como decía Miquel, aunque estábamos a un grado. Espero que la bajada me sirva para recuperar.

Continuará....