Empiezo una serie de cursas atrasadas que por no disponer de material gráfico no he contado hasta ahora. Al no tener imagenes tendré que esforzarme mas en la redacción.
El Carajillo Team se reencuentra nuevamente despues de las vacaciones para hacer el capullo una vez mas. La semana antes yo habia entrenado con la organización los nuevos tramos del recorrido y recordé lo dura que es esta carrera: Humedad, polvo en los ojos que no dejan ver y terreno técnico en buena parte de los 19 km.
Despues de unas cervezas en casa, nos presentamos en Vilassar de Mar, donde al recoger los dorsales nos dicen que somos VIPS y que nos pongamos en las primeras posiciones de salida. Cuando yo empezaba a alucinar pensando que nuestra merecida fama en las ultras había llegado a oidos de la organización, nos aclaran que es por el hecho de estar federados.
Antes de entrar en el recinto de salida encontramos a Nefer e Ignacio. A parte de sonsacarle un gel, aprovecho para tantear su fichaje para los Bierge Sucarra-Trails. Luego el tiempo demostró que son una parte importante del equipo, sobre todo a la hora de hacer la carne a la brasa.
También encuentro a los Camping Trail Bianya, pero como van tan fuertes entrenando no consigo captar imagenes. Dan la salida y corremos por las calles del pueblo entre bengalas, tambores y mucha animación. No veo a Isabelenka, que con mi cámara tampoco me ve a mi al pasar, aunque intuimos que salgo en esta foto.
En la primera subida, igual que hace dos años Miqueu me dice que pa que correr tanto. Así que empiezo la ascensión al Pic del Infern en fila india y nunca mejor dicho, pues parecen todos indios cabreados en pie de guerra que no dan tregua y a la mínima te intentan adelantar por donde no hay espacio.
Y a partir de aquí, puede que mejores sensaciones que anterior edición en las subidas, pero mas lento en las bajadas. Es decir, he mejorado la forma física y me contengo en el riesgo a las torceduras. Y mas en la parte de las marcas blancas, que aunque le han dado una fama inmerecida, mas vale ir con cuidado.
En el último tercio de la cursa enlazo con Albert del Camping Trail. Vamos juntos en la parte mas montañosa pero cuando llegamos a la pista y carretera me deja atrás pues yo automáticamente bajo el ritmo al no tener piedras que pisar.
Igual que hace dos años, en el control de Cabrera de Mar, la plaza está abarrotada de gente animando. Y yo paso en ese momento solo, sin ningún corredor ni delante ni detrás. Por un instante tengo la misma sensación que pueda tener el ganador llegando a meta, siendo el foco de atención. así que me dedico ha hacer pallasadas. En meta dos tantos de lo mismo, llego solito al sprint y entre bengalas que estallan a mi paso. No puedo evitar hacer unas cuantas cabriolas y bailes al mas puro estilo Massai durante los cien metros finales por la arena de la playa. De la emoción de verme haciendo el burro, Isabelenka no consigue mas que grabar un bonito dedo tapando el objetivo.
Dos horas 18 minutos, posición 109 de los 538 que han acabado.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Jajaja, ya nos has bautizado o que?
Me ha hecho gracia lo de que ibamos muy deprisa entrenando. Sólo es que chispeaba! jaja.
Buena crónica.
Por cierto, el año que viene estamos pensando ir al Grand Raid des Pyrennes. Te animas?
Albert Torrent
A que mola, Camping Trail Bianya.
Grand Raid des Pyrennes, és una opció si falla el Montblanc. Ja parlarem.
Salut
Publicar un comentario