PERRO LADRADOR, SEGURO QUE HUELE A VADOR.

Esta semana pasada he iniciado un entrenamiento mas duro. Sesiones de mediodía en el gimnasio y salidas en btt por la tarde. No se cuantas semanas aguantaré el ritmo, pero lo intentaré. Los fines de semana los destinaré a salidas largas, mínimo de cuatro horas, sin importar km ni desnivel.

El sábado probé una alternativa de enlace del Besós con la Serralada: nuevo fracaso. Siguiendo las marcas amarillas y blancas de un sendero detallado en Sant Bartomeu, ascenso al repetidor de Céllecs incluido, intenté llegar hasta Granollers sin conseguirlo. Al final acabé en Vallromanes. Seguiremos insistiendo.

Domingo. Parece increíble pero a las 8.30 quedé con Vador para ir hasta el Corredor. Camino del medio desde Mataró a Llavaneres donde nos encontramos con una cursa btt dentro del calendario de las olimpiadas populares. Como nos hemos adelantado a la salida, a media subida nos adelanta un resoplado primer clasificado, al poco, dos perseguidores, uno de ellos a platillo pequeño. El nivel era paupérrimo. El que iba primero va y se le sale la cadena, y cuando pasa a lado de Vador le dice que este lleva una mierda de bici. En fin, hay de todo por el mundo.

Llegamos al Corredor, bebemos agua, un gel y para Dosrius.

Siguiendo el GPS, pasamos por un camino solitario con un perro negro tamaño mediano-grande justo en medio. Empieza a gruñir y ya me empiezo a reir. Cada vez que salgo con Vador nos ataca un perro. Paso primero, el perro ladra cada vez mas, le ignoro y sigo para arriba. Vador me sigue y después de cuatro ladridos mas desaparece para salir en la parte alta de la cuesta. Lo mismo, paso yo, le digo dos tonterías sin hacerle mucho caso y los acontecimientos se suceden en unos interminables segundos. Primero dejo de oir la rueda de Vador, luego el perro cada vez ladra mas, incluso los ladridos se transforman en el típico ruido de un perro cuando muerde algo y no lo quiere soltar. Desde la cima, no distingo bien la escena pero veo a Vador de pie empujando la bici contra el perro, pero está a salvo, así que dejo mi breve preocupación para volver a reír un rato mas. Está claro que los perros notan el miedo de Vador y se aprovechan de él.

Ya repuestos del susto y después de llamar a nuestras parejas, decidimos recorrer el camino mas llano para poder llegar pronto a casa e irnos todos a comer al Mas Vell de El Masnou.
Merche ya tiene el bebe a punto de salir. Tan apunto que cuando escribo esto ya ha salido. Una bonita niña que se llama Daniela. A disfrutarla pues.