Mostrando entradas con la etiqueta Swiss. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Swiss. Mostrar todas las entradas

lunes, 15 de septiembre de 2008

NENDAZ


Se me está atrasando el blog, así que abreviaré. Después de suspenderse el sábado el Grand Raid por temor a las nubes bajas que impedían el vuelo de los helicópteros, decidimos visitar la estación de Nendaz y sus bisses: conducciones que transportaban el agua desde las cumbres hasta las poblaciones y campos. Concretamnet hicimos el bissé de Saxon, el mas largo del Valais con 32 km y una parte del Bissé Vieux, el más antiguo.

Otra jornada de caminos de cuento y paisajes floreados. Las nubes bajas hicieron su aparición pero para darle un colorido especial al ambiente.Comimos en la antigua cabaña del guarda del bissé. El guarda se pasó años sin ver a nadie.


Al llegar a Nendaz desde el inicio del bissé, me encuentro con una de las pistas de sky balizada para la carrera. La pendiente impone, y creo que aquí es donde Miquel hizo el famoso truco e la bicicleta que bajaba sola mientras el paralelamente hacia volteretas armoniosamente.

Al final de la bajada, un puesto médico para las curas. Creo que es la primera vez que tomo conciencia de la magnitud de la carrera.

Como curiosidad, hemos recogido un montón de rovellons y rosinyols que hemos cenado avec plaisir después de una nueva jornada de mas de 6 horas caminando. (Creo que remarco tanto las horas caminadas durante las jornadas para justificar mi patético inicio del Gran raid)

El siguiente post ya será le Gran raid. El mayor esfuerzo físico que he realizado nunca en un solo día.

martes, 9 de septiembre de 2008

LE CERVIN. La montaña perfecta.


El tercer día se anunciaba soleado, así que decidimos ir a Zermatt e intentar ver de cerca Le Cervin o Matterhorn, la montaña mas fotografiada del mundo y cuya imagen he visto toda la vida en la caja de los colores o en el l chocolate Toblerone.

Llegar hasta la base del Cervino implica dejar el coche en un parking y subir en un cremallera hasta el pueblo, lleno de casa floreadas.

Lo primero que hacemos es visitar el cementerio de alpinistas y de repente nos encontramos con la primera vista apabullante del Matterhorn, completamente despierto, vertical e iluminado, dominándolo todo.
Dos telefericos nos acercan a la estación de Swarzsee a 2.583 m. De aquí sale el sendero que lleva hasta el refugio de Hörnli donde se inicia la escalada al Cervin, pero nosotros optamos por recorrer el glaciar de su base.
Después de caminar un rato en constante subida, llegamos a unos 3.000 metros, limite de la racionalidad para Isabel. La grandiosidad de la base de la montaña, el fuerte viento y la falta de oxigeno, nos obligan a volver. Supongo que como siempre, el destino nos ha evitado algún susto, pues la ruta que pretendía realizar pasaba por un glaciar helado que podía estar en mal estado. Las fotos son incapaces de captar la sensación, pero imaginadlo:


Decidimos bajar hasta Zermatt a pie, pasando por varios pueblecitos y comer por el camino. Aprovecho el garmin y sigo el camino más bonito, dejando la pista para los turistas.

Comemos en una vaquería de Stafelalp adecuada como bar. El alemán va descalzo y ofrece leche recién ordeñada a sus clientes. Prefiero una cerveza.

En Zmutt, pueblecito idílico antes de llegar a Zermatt, vemos las cabañas con el mismo sistema de protección que los horreus asturianos y gallegos.

También tienen el jardín de Ricola, con mas de 20 tipos de plantas suizas que usan para sus caramelitos.

Al final llegamos agotados a la estación del cremallera. Otra jornada de mas de ocho horas de caminata. Al final tendré que hacer Le petit Raid en vez del Grand.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

LA GRUYERE

Como el segundo día prometía lluvia, nos decidimos a ir hasta la ciudad de Gruyere. El pueblo, antigua plaza fortificada, es una preciosidad.


Empezamos por tomar un café en un pequeño bar y confirmamos, pues ya
habíamos sido advertidos por tío Matias, que lo acompañan con una pequeña
cazoleta de chocolate suizo lleno de una nata doble única en el mundo. Esta
nata es la que se forma en las grandes ollas de leche que utilizan para
fabricar el famoso queso.

Animados por el rollo gastrónomo, y viendo que no llueve, nos proponemos
realizar el senderos de las queserías, un recorrido circular que tengo
grabado en el Garmin y cuyo punto mas alto es la estación de Moleson.
Así que de nuevo estamos andando por una pista que gana metros rápidamente y
nos ofrece bonitas vistas de toda La Gruyére.


Durante todo el recorrido nos empapamos de viejas cabañas queseras, vacas de
todos los tipos, gente trabajando... todo ello envuelto en un ambiente
genuino, nada turístico.

Durante las cerca de 6 horas de caminata no encontramos mas que a una
familia que caminaba en sentido contrario y eso sí, el restaurante
minimalista de Odile y Maurice, una pequeña cabaña anexada a un establo
lleno de vacas, con una gran olla al fuego, montones de conservas, lecheras,
quesos y una terraza con vistas. De lo poco que entendimos a la Sra Odile
nos quedó que estaba orgullosa de sus platos, y que habían venido desde New
York a degustarlos.

De regreso a la Gruyere, visita a la fabrica de quesos, compra de algunas
variedades (el Alpage es el mas apreciado) y sorpresa, en un almacén vemos
un robot sacando las piezas de los estantes, oliéndolos y dándoles la
vuelta.

Al final, la visita turística ha terminado con otro pedazo de caminata. Y
solo quedan dos días de descanso antes del Grand Raid (Grand Prix para
Isabel).

De camino hacia el Valais hemos quedado con Michel en Montreaux para cenar y
organizar la verificación de la bici el viernes. Después de varias maniobras
para encontrarnos, nos hemos tratado una fondue junto al lago Lemman
mientras se ponía el sol. Por cierto, deliciosos los mejillones frescos del
lago, los recomiendo encarecidamente.

martes, 2 de septiembre de 2008

OVRONATZ

Segunda etapa de las vacaciones. Salimos hacia el Valais Suizo para pasar una semana de relax, aclimatamiento y turismo. Antes, parada en Laussane para ver al otro componente del carjillo team y familia, a los que localizamos por la camiseta de la federació catalaine que han colgado en la terraza. Una curiosidad: a la maison de Michel, l'eau est gasifiqué, o lo que es lo mismo, el agua del grifo sale mineral y con gas.

El cuartel general es un chalet alucinante con un jardín muy gustoso. El tiempo acompaña y nos animamos a excursionear.


La primera etapa tiene salida desde Ovronatz, la estación de sky donde nos alojamos. Un telesilla nos lleva a unos 1900 m, donde empezamos una ruta circular que pasa por el Col du Fenestral a 2453 m. Aquí nos damos cuenta que Swiss es mucho Suiza. Paisajes impresionantes. Eso sí, caminas unos metros y hace calor, giras hacia el valle y el viento de pela de frio, y así constantemente. Quita y pon ropa. Las diferencias térmicas son brutales.


Encontramos un refugio o Cabane completamente equipado y sin nadie en el interior, con sopa preparada, café, y todo lo que pueda hacer falta. Solo tienes que depositar el importe de tu consumición en la cajita.

Desde este punto tenenemos unas vistas magnificas del Montblanc.


Bajamos hasta el Lac Superior de Fully donde comemos al lado de unos soldados suizos de maniobras, es decir, trincandose unas cervezas.


Nueva subida hasta la base del Grand Chavalard, de 2899 m, y paseo por la cornisa sobre el Valais o valle del Rhone. Unas vistas espectaculares.


Casi llegando al inicio del bucle, momento pato aventura para pasar un glaciar.


Al final, la salida del primer día ha sido agotadora, unos 18 km y mas de 8 horas.